Empezamos el juego controlando a una niña llamada Alicia que compañía de su gato Socrates se dispone a leer un libro que reposa en el suelo. Cuando mandemos a Alicia leer el libro, titulado "La Valquiria", se nos empezará a relatar la historia de Gwendolyn, una valquiria hija del Rey Odin. Vamos, que no engañaba el título.
Alicia, una pequeña gran lectora.
Estando con la historia de Gwendolyn, es cuando el juego empieza de verdad. La mecánica es sencilla, hacemos fases controlándola y entre una y otra vamos viendo escenas de su historia. Las fases son curiosas. Una fase, o pantalla, esta compuesta por un mapa con unas cuantas pantallas circulares. ¿Circulares? Si, con lo de curiosas me refería básicamente a eso. Y es que en estas pantallas si avanzas en una dirección acabaras volviendo inevitablemente al punto de inicio. Por suerte en todo momento tenemos un circulo en la esquina inferior derecha de la pantalla que nos indica en que posición de la pantalla nos encontramos. El objetivo en estas pantallas es simple, acabar con todos los enemigos que nos salgan. Cuando lo consigamos la salida, o las salidas de esa pantalla estarán accesibles y podremos ir a otra pantalla con la misma mecánica. Y así hasta que lleguemos al jefe de esa fase, que daría final a la misma si lo conseguimos vencer.Al terminar la fase seguiríamos con la historia, y al cabo de un rato tendríamos otra fase, con una estética y enemigos distintos acordes con lo que ha pasado en la trama pero con el mismo fin. Y así hasta acabar con la historia de Gwendolyn.
El juego tiene algunos toques de RPG, ya que al degustar comida que encontramos , cultivamos o que adquirimos en un restaurante, podemos subir de nivel a nuestro personaje. También podemos mejorar el poder del arma absorbiendo fozones, unas bolas de color rosado que sueltan los enemigos al morir. Otra posibilidad interesante es la de mezclar materiales, que sirve para hacer bebidas con distintos efectos, desde recuperar vida hasta mejorar nuestra defensa temporalmente.
El control del juego no da demasiados problemas, en general funciona correctamente aunque en mi opinión los personajes tardan un poquito mas de lo que deberían en ejecutar las ordenes que les hemos dado desde el pad. Esto se agrava en ciertos momentos en el que ya sea porque hay muchos enemigos en pantalla o porque el enemigo en cuestion es muy grande el juego se ralentiza un poco y cuesta algo mas controlar a nuestro personaje
El gran problema del juego es que es tan bonito como aburrido. Ya de por si las fases no es que sean muy variadas, en algunas te ponen ambientes cálidos o fríos que te hacen perder vida, obligándote a hacer una bebida que te permita soportarlos, pero eso no quita para que todas las fases sean circulares y que el fin siempre sea el mismo. Pero bueno, con Gwendolyn esto lo aguantas. Lo grave llega cuando acaba su historia y tienes acceso al segundo libro en la biblioteca de Alicia. Cuando lo lees pasas a conocer la historia de un segundo personaje, y tambien a controlarlo. ¿Que es lo malo de esto? Que tienes que hacer ooooooootra vez las pantallas que hiciste con Gwendolyn en su mayoría, tienes que subir oooooooootra vez al personaje al igual que lo hiciste con Gwendolyn, y tienes que hacer en un 90% mas o menos todo lo que hiciste con Gwendolyn.
Para entendernos, el juego consta de 8 fases distintas, y la historia de cada personaje consta de 7. Asi que al acabar la historia de Gwendolyn uno ya ha visto practicamente todas las fases del juego y todo que queda es repetir. ¡Y ojo, que no hay 2 personajes! ¡Hay cinco! Si, hay que hacer 5 veces las mismas pantallas, subir de nivel a 5 personajes de manera identica, enfrentarse a los mismos enemigos, y todo esto con la unica motivación de seguir viendo sus diferentes historias. Cada personaje suele tener un boss exclusivo, pero definitivamente no compensa.
Así que Odin Sphere es un juego de unas 30 horas de duración de las cuales 20 se basan en repetir pantallas que ya has hecho en las 5 primeras horas con distintos personajes. Personalmente, me parece aburridisimo. Al acabar las historias de los 5 personajes tienes acceso a un libro nuevo en el que intervienen todos y se pone fin a la historia.
La historia tiene un gran peso en el juego, y está bastante bien. Los personajes tambien molan. Esto es lo que en mi opinión hace que merezca un poco la pena jugarselo. El juego tiene una trama muy sólida y en el que las historias de los distintos personajes encajan a la perfección. Ademas no se puede decir que sea típica y tiene varias sorpresas.
Con el gran aspecto gráfico mencionado al principio, solo queda mentar el apartado sonoro, que raya a gran altura. Grandes melodías de Hitoshi Sakimoto, Masaharu Iwata, Kimihiro Abe, Mitsuhiro Kaneda y Manabu Namiki acompañan este agridulce juego.
Genial.
A mi me encantó. Aún siendo innegable y terriblemente repetitivo... tiene tanta magia. La historia de Gwendolyn es de lo mejor que he visto nunca. Ganas de rejugar aumentando.
ResponderEliminarSólo por ver la belleza del juego y escuchar su música lo rejugaría tantas veces como fuera posible.
ResponderEliminarJuas, justo me ha llegado hoy, que lo pedí en la web de Game xD. Es que quería jugarme el Muramasa, pero para eso quería jugarme primero el Odin Sphere y... ¿no debería jugarme también antes el Princess Crown? "^_^ Ya sé que no siguen una historia, es pura manía personal xD.
ResponderEliminarPD: Me ha sorprendido mucho leer tu análisis, en realidad sólo sabía lo de las pantalla circulares, no tenía ni idea de que fuera tan repetitivo. Igualmente, no es algo que me fastidie tanto como a otra gente.
El Princess Crown me gustaria probarlo, ¿pero no está solo en japonés?
ResponderEliminarGráficamente una delicia, lástima las ralentizaciones que sufre el juego (sobre todo en la parte final creo recordar) y lo pesado de repetir escenarios, porque podríamos hablar de un juego redondo.
ResponderEliminarEl Princess Crown está en japonés, pero es perfectamente jugable, lo único que no entenderás mucho de la historia, pero aún así vale la pena, para muchos sigue siendo el mejor juego de Vanillaware.