Shiren The Wanderer (Wii)

 Mirando la portada de este juego y el título que aparece en ella, cualquiera podría pensar que se trata de una nueva licencia. Pero para nada, aqui el amigo es la tercera entrega de la saga Shiren, un referente en Japón en el género de los RPGs de mazmorreo. Supongo que los amigos de Atlus buscarían no espantar a los clientes con un 3 en el titulo y optaron por algo menos desafiante y simplista. Tampoco es cuestión de tomarla con ellos, que han dejado la genial portada original (Sega, nunca perdonaré lo que hiciste con la portada del Shiren 1 de DS) y se han currado un manual en color. Buen trabajo.

Sobre Shiren 3 se puede decir que es un RPG para valientes. Un RPG en el que cualquier fallo puede ser fatal y llevarte a perder todos tus items, armas incluidas. ¿Duro? Desde luego, pero teniendo en cuenta que en las anteriores entregas no solo perdías todos tus objetos sino que tu personaje volvía a tener nivel 1, resulta una dureza incluso asequible. Además, para quien no se sienta valiente siempre existe un modo Facil en el que no pierdes los items al morir. Yo me lo he jugado en normal, que conste.





El juego me enganchó mucho. No se que tiene pero le metí bastantes horas al día hasta que conseguí terminarlo. Y eso que hubo momentos dificiles en los que morí y tuve que currarmelo para conseguir buenas armas de nuevo, pero nada, ahi seguía dandole. La mecanica del juego es sencilla, se trata de completar mazmorras mientras la historia avanza. Las mazmorras son laberintos de distintos pisos en los que la muerte acecha en cada esquina en forma de enemigo cabrón.



 Un anuncio sincero. Vas a morir mucho.

Una cosa que el juego consigue transimitir muy bien, sobre todo al principio, es la sensación de que te lo tienes que currar para sobrevivir. Esto no es como cualquier RPG en el que te basta con subir 10 niveles antes de avanzar para evitar los problemas, aqui cobran mucha importancia los items que encuentras en la mazmorra y como los usas. Si hacemos como en cualquier otro RPG en el que vamos a espadazos contra cualquier enemigo mientras guardamos todo lo que hemos encontrado acabaremos muertos seguro. Aqui hay que saber sobrevivir.

La historia del juego me gustó mucho, aunque muchos puristas de la saga la han puesto a parir, no porque sea mala sino porque prefieren que no haya escenas de historia. Parece que este es el Shiren en el que la historia tiene mas importancia y es lo que critican. Pero como digo a mi me gustó.

Shiren es el prota por cierto, y en este juego viaja con su maestro, que tiene el inesperado nombre de Sensei, y un hurón llamado Koppa. Shiren es un prota al estilo Link, vamos, que no habla, asi que el protagonismo en las conversaciones se lo lleva Koppa. El personaje se hace querer, ademas de lo simpatico que resulta que el protagonista humano no hable y que el protagonista animal si xD Bueno, Shiren y Sensei son Wanderers, que no se como traducirlo (¿Deambuladores? Me suena mal) y viajan buscando todo aquello que huela a dinero. En este juego los rumores les llevan a buscar la mansión de Karakuri, una mansión que según dicen está llena de riquezas. Hay un cuento popular japonés que tiene mucha presencia en la historia de este juego, que es el cuento de la princesa que nació de una caña de bambú, la princesa Kaguya. No la conocía del todo y me gustó como está contada. Por cierto que el guión de este juego es de Masato Kato, famoso por ser el guinoista de tanto Chrono Trigger como Chrono Cross.

El juego tecnicamente es bastante discreto, siendo los modelados de los personajes algo pobres. Los escenarios tampoco son gran cosa pero hay algunos bonitos. Lo malo es que te puedes encontrar ralentizaciones al correr por las mazmorras. Pero bueno, nada especialmente grave. La música está muy bien y cuenta con temas bastante pegadizos.

¿Que si recomiendo el juego? Bueno a mi me ha gustado, pero desde luego no es un RPG para todo el mundo. Creo que se tienen que cumplir dos cosas para que te guste. Primera, que te gusten los juegos de la vieja escuela, y segunda, que busques un gran reto.